12 de junio de 2015
El desempleo juvenil se sitúa actualmente en el 51,4%. Es una cifra devastadora y una de las más elevadas de la eurozona. La situación de los jóvenes españoles es preocupante para las instituciones públicas que nos gobiernan y, por eso, es de obligación moral buscar las soluciones más oportunas para esta problemática social.
La Formación Profesional Dual es un plan mixto de formación y ocupación que llegó a España como plan piloto en 2011. El objetivo de este sistema educativo es lograr aumentar la cualificación teórica de las personas con títulos reconocidos y que, a su vez, puedan poner en práctica los nuevos conocimientos en su puesto de trabajo.
El hecho de combinar un trabajo remunerado con la asistencia a clases teóricas, convierte a la FP Dual en un modelo atractivo para los jóvenes. Pese a ello, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) advierte que el porcentaje de alumnos en España es muy bajo. De hecho, en Alemania el 42% de los alumnos se decanta por la FP en cualquiera de sus modalidades, mientras que en España lo hace sólo el 1%.
Uno de los requisitos básicos que piden muchas empresas para incorporar a personal nuevo es experiencia de trabajo en puestos similares. Como hemos mencionado con anterioridad, una de las principales problemáticas de nuestro país es el desempleo que afecta a los menores de 25 años. Este grupo de personas jóvenes sin trabajo supone más del 50% de la población activa. Son personas sin experiencia y, en ocasiones, incluso sin titulaciones académicas.
La Formación Profesional Dual permite a los jóvenes adquirir experiencia laboral específica sobre el sector al que se quieren dedicar. Además, las empresas pueden recibir importantes beneficios fiscales y, a su vez, preparar a profesionales a la medida de sus necesidades específicas.
La importancia de esta modalidad formativa es tal que ha permitido a muchos países, como Alemania, Austria, Dimarca o Suiza, reducir el desempleo. Por poner un ejemplo, el 61% de los alumnos de FP Dual alemanes han conseguido trabajo cuando han terminado la formación, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La Alianza para la Formación Profesional Dual ya está en marcha y ha nacido gracias a la iniciativa de la Fundación Bertelsmann, la Fundación Princesa de Girona, la CEOE y la Cámara de Comercio de España. Estas cuatro entidades consideran que es necesario “hacer una apuesta por la formación profesional […] que se adecue a las demandas del mundo laboral para reducir la alta tsa de desempleo” juvenil. La importancia de la Alianza es tal que en el comité ejecutivo se encuentran Acciona, Agbar, Bosch, Frit Ravich, La Caixa, Nestlé, Repsol, Seat y Sol Meliá.
El objetivo en este caso es “crear una red estatal de instituciones y empresas comprometidas con el desarrollo de la formación dual de calidad en España”. Y desde la Alianza afirman que “la formación profesional dual es un sistema educativo pensado para que el alumno se forme en alternancia entre el centro educativo y la empresa”. Por otra parte, explican que “se trata de un modelo que permite conocer la realidad del mundo laboral y facilita la incorporación del joven al mercado de trabajo”.